El alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara, ha dado cumplimiento en poco más de un año a uno de sus compromisos históricos de legislatura: la puesta en valor de todo el patrimonio histórico y cultural del municipio. A los grandes trabajos realizados en la Villa Romana de Torremuelle, donde han salido a la luz 19 piletas con más de 20 siglos de antigüedad, se suma ahora el adecentamiento e instalación de iluminación de la Torre del Muelle, declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
Esta acción, que ha estado coordinada en todo momento con la Junta de Andalucía, da respuesta a un compromiso de legislatura que el primer edil benalmadense tenía con los vecinos de la zona, tras años y años planteando sus demandas de puesta en valor de la zona al gobierno anterior e iniciar el procedimiento nada más llegar a la Alcaldía.
Los trabajos de instalación de iluminación, que se viene realizando desde principios de junio, comenzaron en la noche de este martes su fase de pruebas, que está sujeta a cambios, una vez realizada la obra necesaria para la instalación de acometida y colocación de farolas en los accesos. Además, permitirá a la torre contar con iluminación de diferentes colores, sumándose a la iniciativa de la Corporación de iluminar edificios emblemáticos en fechas señaladas del calendario de Días Internacionales.
El alcalde de Benalmádena estuvo acompañado en la noche de este martes de la edil de Cultura, Jésica Trujillo, y la de Participación Ciudadana, María Luisa Robles, así como personal técnico, supervisando el primer día con luz de la torre vigía e incidiendo en la necesidad de impulsar nuevas acciones para proteger al BIC de posibles actos vandálicos e incrementar más la iluminación del entorno, que también cuenta con farolas con más iluminación.
Cabe recordar que el verano pasado se arrancó con este proyecto que requería de todos los permisos de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte dependiente de la Junta de Andalucía, un proceso tedioso “pero viable”, dijo el alcalde, que demuestra que, “cuando se quiere, se puede”, siendo “una obviedad” que la zona de Torremuelle estaba “abandonada por clara falta de voluntad política” del gobierno anterior.
Resumen de las actuaciones
Las actuaciones en el entorno de esta torre vigía, fechada en el siglo XVI, han contado con la supervisión y dirección de un técnico arqueólogo. Hasta ahora, se ha realizado el 80% de la obra proyectada, instalación del primer vallado perimetral y de la luminaria monumental de bajo consumo. Ahora, está pendiente de la ejecución de un añadido al proyecto ya aprobado por los organismos pertinentes, para la instalación de un nuevo vallado en el acceso al entorno de la torre que permita al visitante un cómodo acceso y evitar a su vez el acceso a zonas peligrosas del entorno.
Estos trabajos se realizan gracias a la colaboración de diferentes áreas municipales como Servicios Operativos, Urbanismo y Cultura, siendo supervisados por el alcalde en todo momento. Tanto el equipo de gobierno como los técnicos municipales son conscientes de que esta actuación es una primera fase de cara a la recuperación del monumento, “estando dentro de nuestra hoja de ruta la recuperación completa de esta torre vigía con un proyecto de conservación en el propio monumento”, siendo una actuación futura similar a la que se prevé iniciar en breve en Torre Bermeja a las puertas del Puerto Deportivo.
Datos históricos sobre Torre del Muelle:
Esta torre iluminada es una de las tres torres vigías situadas en el municipio de Benalmádena, de construcción cristiana, siglo XVI, cuya función era de apoyo al sistema costero defensivo. Situada en un montículo que cae sobre la playa, dominando dos pequeñas ensenadas. Algunos autores han propuesto que bajo la torre de esta estructura puede haber restos de la etapa romana, al hallarse en el mismo ámbito que la conocida villa romana marítima de Torremuelle.
