El último pleno fue la gota que colmó el vaso al producirse la ausencia del portavoz de los populares, Juan Antonio Lara, en un debate que tras pasar un año desde el inicio de la pandemia sigue todavía sin tener previsto cambios en el reglamento ni ha preparado mecanismos para no alterar el orden plenario ante la posibilidad de que un concejal de riesgo o convivientes de riesgo pida asistir de manera telemática. Si un concejal estuviera de baja por enfermedad, tampoco podría asistir a través de este mecanismo, ni la pandemia ha logrado un cambio de las normativas en Benalmádena, todo lo contrario que otros ayuntamientos como el de Málaga donde se permite asistir telemáticamente desde septiembre o la Diputación, que celebró el pleno telemático esta semana.
Las últimas reuniones entre los distintos grupos municipales en las que se ha abordado este asunto han acabado por dejar constancia por escrito la oposición de su misiva al alcalde, un escrito dirigido al socialista Víctor Navas, que ya ha pasado el covid19 hará un año, para que contemple la posibilidad de que los ediles en situación de riesgo, ya sean del equipo de gobierno o de la oposición, o con familiares o convivientes de alto riesgo, puedan participar del debate y ejercer su derecho al voto y de representación garantizando su asistencia telemática, una cuestión que ya se aprecia en ayuntamientos como el de Fuengirola o Torremolinos, pero no en el de Benalmádena. Es más, muchos ayuntamientos y grupos políticos ya ofrecen sus comparecencias permitiendo el acceso solo a gráficos para evitar conglomeración de personas.
Fuentes consultadas por contracrónica.es señalan que el alcalde aseguró a la oposición durante la reunión que ha rechazado la misiva para el pleno de febrero en rotundo porque el anterior debate plenario tenía una incidencia más alta y los concejales asistieron, aunque algunos ya se ausentaron por riesgo o por estar haciendo una cuarentena obligatoria por ser contacto estrecho con un positivo.
De momento, el alcalde se ha comprometido a cumplir con todas las medidas higiénico-sanitarias, pero poco más, ni siquiera ha atendido a las misivas sobre el estado de salud de algunos concejales de la oposición que reclaman su derecho a asistir de manera telemática.
La situación ha provocado un enorme malestar en los grupos de la oposición, según ha podido saber contracrónica.es, ya que incluso no se da la opción de que pudiera ser semipresencial o telemático pese a que algún edil de la oposición ha aportado partes médicos e informes, según aseguran algunas fuentes, al objeto de que el alcalde acepte la misiva, e incluso un concejal de la oposición ha estado ingresado en el hospital hace pocos días.
Llama la atención de que el pasado pleno ya hubo concejales de la oposición que no pudieron asistir al pleno debido a que estaban en cuarentena, fue la situación del portavoz del PP de Benalmádena, Juan Antonio Lara. El pleno de Benalmádena sigue sin estar preparado siquiera para permitir la asistencia telemática de esos concejales, en caso de que, por ejemplo, registraran un cuadro febril días antes de un debate, motivo por el que se ruega no mantener contacto y optar por el autoconfinamiento. Así que si estos concejales, por prevención, aparición de algún síntoma asociado o sospecha de contacto con un positivo, quisiera ejercer su derecho al voto y de representación en el pleno de manera telemática y el resto de manera presencial, el concejal perdería sus derechos.
REACCIONES
Fuentes de VOX consultadas por este periódico han mostrado su indignación porque “al no contemplar esta posibilidad, se está negando a un concejal electo ejercer su derecho al voto y esto es algo muy grave que habrá que estudiar”, señalan, “debería permitirnos hacerlo telemáticamente, por salud”, subrayan. La oposición no quiere polemizar y cree que esta cuestión tiene fácil solución. El temor se aprecia en los debates y prueba de ello es que en los vídeos de los plenos últimos se ha podido ver a la portavoz de VOX, Gema Carrillo, utilizando doble mascarilla.
Desde Cs, su portavoz, Juan Antonio Vargas, también ha advertido de esta cuestión en Junta de Portavoces, y en plenos anteriores ha manifestado públicamente que el pleno “no estaba siendo un lugar seguro”, ya que en plena pandemia y elevadas tasas de incidencia ni siquiera se guardaban distancias claras de seguridad, solicitando en diversas ocasiones que se haga telemático. Lo único que se ha conseguido es que en el próximo pleno se dejen dos asientos vacíos entre concejal y concejal.
El alcalde socialista se ha comprometido a esto y la oposición, que no quiere entrar a calificar la cuestión, va a continuar pidiéndole que entienda la preocupación de sus compañeros de Corporación, “que al margen de las diferencias ideológicas, son compañeros y el alcalde debe ser solidario y responsable”. Navas alega que no existe reglamento que le obligue y de momento habrá pleno presencial. Así las cosas, si la oposición quiere participar y votar no tendrá más remedio que acudir al debate pese a tener familiares, convivientes o incluso siendo algún concejal grupo de riesgo. Para hacer el pleno más rápido, Navas cambiará la rutina del pleno y ha decidido además, de manera unilateral, abrir la posibilidad de no contestar a las preguntas de la oposición, haciéndolo por escrito, algo que ha indignado a la oposición más aún porque ni tan siquiera habría debate.